Domingo
(27-2-2022), tres caballeros veleños nos encontramos en el habilitado punto de
encuentro. Con las burricletas prestas y bien dispuestas, “nos remangamos” para
la semanal contienda. Después de las tímidas lluvias, de las últimas horas, presentamos distintas
alternativas, “parriba escurre más el agua”;
no se hable más, una combinada y recortamos y estiramos sobre la marcha.
El torreón de
la Gamonosa, nos lleva hacia los vecinos
pueblos cerreros; los más
cercanos, despiertan “de resaca” y sus
silenciadas calles, todavía vacías. Enlazamos localidades por
trochas y divertidas veredas, unas a la vista, otras, escondidas entre la frondosa arboleda,
atravesando las empapadas y anchurosas praderas y las más intrépidas, apuntando
hacia arriba. Nos recreamos por estos
lúcidos escenarios, a la vez que,
negociamos y estiramos la ruta pactada.
Cóctel variado
de subidas, algunos repechos con etiqueta y un surtido de entretenidos
senderos, para despertar y alimentar los
ávidos sentidos. Cabalgamos por caminos
compactados y regados –en su punto- , se percibe en la ola de aire limpio y en el amigable paisaje, el lavado de cara
que han dejado “las tímidas lluvias”; panorámicas
más alegres y vivas, con pasos bien marcados y pequeños charcos por la encantadora moqueta.
Los rincones de
Cervera, engalanados y bien ataviados, hacen las delicias de los caballeros
congregados; angostos pasos, sendas de ficción incrustadas en la plácida estampa. Desde Marrupe, la
efímera bajada de los enebros, nos transporta a otra dimensión más “sideral”;
su recogida umbría nos acoge entre su
placentero regazo; delicadas mantas de
musgos, entre la humedad del ambiente y la solícita luz que da brillo al
imponente lugar.
A nuestro paso,
reconquistamos insignes cerros, acogedores encinares acurrucados en los afortunados
espacios naturales. Animado y con brío,
se reincorpora a filas el amigo
Alberto “El Maestro Ceramista” y nos avisa “que ya comenzamos la
temporada”; éste, “siempre viene con ganas”. Martín “El Fiero”,
también está “en vena y motivado, no se
achanta” y sus propuestas –desde ya- son de jornadas más largas.
Muy buena jornada, agradable sensación de bienestar durante todo el recorrido, -invitaba el campo y sus acogedores rincones-. Destacar, las maravillas de la senda de Cervera a Marrupe, muy divertida y disfrutona, estrechas veredas con amplias aceras, marcadas por los “jabatos”. No menos atractiva, se presentaba la zona de los enebros, con su microclima particular y su mágica belleza, suspendida en el ambiente. “Conserva tus sueños, nunca sabes cuándo te harán falta.” “Algunas personas quieren que algo ocurra, otras sueñan con qué algo pasará, otras hacen que suceda.”
Resumiendo,
ruta circular de 63 kms. Los principales caminos transitados han sido, Cañada
Real Leonesa Oriental, Camino de Velada-Mejorada-Segurilla, Senda de Los
Leñadores, Camino de Segurilla-Cervera, Senda de Cervera-Marrupe-San Román de
los Montes-Pepino- La Portiña- Cerro Medellín- Cañada Extremeña- Santa Apolonia (Valdelacrua, El
Malojo)- El Casar- Cordel- Gamonal-Velada.
Buen
día………..SALUD.
“…..mil caminos por andar y mucho tiempo perdido sin saber a dónde ir,
no tengo tiempo ni sitio….”.