Ruta: El Gran Lago Helado

     Domingo veintidós de diciembre, mañana de temperaturas “poco agradables” por estos lares. Cinco caballeros veleños y “dos aspirantes gamoninos”, dispuestos a presentar “batalla” a los caminos que nos echen y  al frígido ambiente de este  despertar invernal. Con las “burricletas” preparadas y los “achiperres” que no nos han de faltar, por lo que “pueda pasar”. “¿Hacia dónde marchar?”. Ponemos “las cartas sobre la mesa”, en el “menú” buenas propuestas, hasta que se pronuncia “El Gran Maestre”, “hacia la tundra siberiana”, hoy es la fecha.

      Comenzamos la etapa, buscando la vía  “soberana”; enseguida, comentamos  sobre el “reto” al que nos  “enfrentamos”; caras y manos “nada templadas” por las bajas temperaturas de la noche pasada; charcos congelados, tierra trabada con “melodía incorporada”  y  “tabletas” de hielo, quebrando  a nuestro paso. Una estampa blanquecina,  brillando (“y avisando”) por la ancha pista y entre las encinas…”¡¡¡¡Alto, la burricleta se ha espantao!!!!!” “Si ya me tocó el domingo pasado”- se lamenta “El Gran Maestre” algo “desesperao”. Buscamos el abrigo del sol, para “el daño reparar” y “el susodicho”, con ímpetu y estilo,  “mima” a su  “ fiel jamelga”,  y de paso, las manos se calienta. Proseguimos por “el tupido glaciar”, “más de lo mismo”, arroyos con “caramelos” flotantes, “cabalgamos” sobre una alfombra de escarcha, con cuidado y tacto  por si “las bichas” se “encabritan”. Por encima de  nuestras cabezas, en todas las direcciones,  sobrevuelan “cientos” de grullas, componiendo  una balada magistral,  con sus  acordes melódicos, tronando por el animado encinar. Abrimos las puertas de la “asalvajada ” frondosidad, brillo cristalino  desparramado por el suelo  y el “congelado arroyuelo”,  oculto en una  cueva de lustrosos  fresnos; “flashes” se disparan por todos lados, esperando “el mejor plano”.  La postal invernal es nuestra aliada, por las perdidas sendas ganaderas y el  paraje elogiado y  de tranquilidad sembrado,  nos acerca al rincón “apaciguado” de  la laguna helada. Buenos momentos, risas y bromas varias y desde el  polar continente, felicitación para nuestro “incombustible y admirado presidente”. Repostamos y compartimos viandas, productos variados  de la tierra y con unos “caramelos” venidos de Inglaterra,  nos obsequia el eufórico Maestro.

Camino Real

"El grupo bien arropado"

     

"Por el camino helado y blanquecino"

"La huella de la fuerte helada"

"El grupo manteniendo el tipo"

"Camino del Dehesón"

"De uno en uno lo intentamos"

"Estudiando para vadear el arroyo"

     

"El iluminado rincón"

"...y con nota pasamos"

     

"El Gran Lago helado"

"La Dehesa olvidada"

"Los demás llegando...."

"Rompiendo el hielo"

"Posando....y Miguel retratando...."

      Reemprendemos la jornada, la frialdad se esconde entre el pausado encinar y en la gélida umbría, los ánimos no se enfrían; atrás dejamos la ancha vía;  ceñidas veredas,  ocultas en la arboleda y entre las jaras secas, “una descuidada liebre” salta por la retaguardia; nos guiamos por la interminable alambrada,(“es la alternativa más acertada”) “a tientas” por el relegado laberinto,  entre  la exuberante maleza,  escondido, “el portón de la victoria”  abrimos.  El extenso y azulado  embalse nos alegra la vista, un acogedor alcornocal nos presenta su transparente  belleza y la fornida   yeguada  se exhibe con  sus  elegantes  carreras. Avanzamos bien agrupados y  sin novedad, contemplamos el perpetuo  altar montañoso,  esquivamos charcos y algunos cruzamos, amplios campos reposados entre labranzas y antiguos establos, que  nos llevan a caminos más conocidos y  en otras lides conquistados. A nuestras espaldas, dejamos  el agraciado lienzo perfilado…..cuando a la villa veleña entramos.

"Abandonando la planicie siberiana"

"El encinar asilvestrado"

    

"Por la umbría y temperaturas frías"

"Veredas del jabalí"

"Laberinto de jaras y encinas"

"Victoria en la puerta del triunfo"

"Embalse de Navalcán"

"Cañada Real Leonesa Occidental"

"Bien alineados en el llano..."

"Camino de los Veratos"

"Vista del pozo del arco"

"Establos de Villabuena"

"Camino de Parrillas, Navalcán a Velada"

    

      Resumiendo, ruta circular de 40 kilómetros, los principales caminos que hemos transitado han sido; Camino Real, Camino de Velada a la Corchuela, Senda el Jabalí, Cañada Real Leonesa Occidental, Camino de los Veratos, Camino de Parrillas, Navalcán, Arenas a Velada.

     Pd: Roberto, muchas gracias por tu aportación fotográfica.

     Buen día…………SALUD

        

“mil caminos por andar y mucho tiempo perdido sin saber a dónde ir,  no tengo tiempo ni sitio….”