Domingo ocho de diciembre, mañana fría y
con notables bajas en la fiel escuadra.
Cinco caballeros veleños a la cita acudimos;
Roberto “El Bueno”, de “la mano”
se trae a Miguel “El Abuelo”, otro valiente gamonino. Con el horario de salida
cambiado (“en adelante a las 9:00 horas”), “El Gran Maestre” no acude a la
“llamada dominguera”, “en los aposentos de su castillo” se ha quedado
celebrando sus “veintipico” años “el muy pillo” (El próximo día, nos presentas
el justificante “de no asistido”); la resaca de la “sonada cena burriclista” y
otras obligaciones, deja a más de uno entre
sus calientes jergones.
Con nuestras
burricletas preparadas y las ideas también heladas, “¿dónde nos comemos hoy la
empanada?”; “nada, en este día, nadie
manda”, a todos nos da igual, “pues pa´arriba” para calentar. Sin rumbo fijo,
“el camino hacía algún lugar nos llevará”.
Comenzamos la jornada, por dónde salgamos nos aguarda una estampa helada; buscamos la
villa “gamonina”, por la pista “congelada” y las vistas “blanquecinas”.
Cruzamos las desiertas calles, hasta que los pausados cerros sus puertas nos
abren; en el primer apretón, suben las temperaturas en el aguerrido
pelotón. Nos recreamos, de paso nos
calentamos por los alcores de los gamones, “Las piedras caballeras” desde el
altozano nos vigilan, el rastro
congelado, reposa en la tapada umbría, …y
en la aldea “zorrera”, Diego “Sin Miedo” e Ilde “El Suegro” se suman a la
animada avanzadilla. Les damos la
“bienvenida”, con intenciones ruteras nada claras y “el banquete” de la escuadra
veleña, todavía es portada en las primeras planas; atrás dejamos la villa
Segurilla y marchamos hacia el territorio de las “veredas maravillas”. Nos
“perdemos” en la quimera de “los
profundos barrancos”, morada sembrada de
magia y refugio idílico para los
revoltosos duendes y hadas y rincón de retiro para los “caballeros más
díscolos”. Entre la estrechez de los muretes
de piedra, una cueva de fornidas encinas con una estera
de hierba fresca revestida y de
los “chaparros”, abundantes “barbas de viejo” colgando. En plena “faena”,
improvisamos y “elegimos” la belleza de la postal para hacer un “divertido
inciso” y “obsequiar” con un presente al “maestrillo”. La desgarrada oquedad
nos acuna entre el laberinto de sus brazos;
destreza, habilidad, en algunos
tramos las “burricletas” del ramal…y alguna liebre, también salta al “morral”. “Aterrizamos” en la “gran cañada”, para
“relajarnos” y coger “carrerilla”, hacia el “paraíso de la majada”; ahora,
“toparriba” por la angosta senda, a un lado, la extensa pradera ganadera y en las alturas cerreras, la divinidad y el sosiego cobijados en los
adoquines del “encanto”.
Después de tanta emoción, abrimos el
“zurrón”, “pero vamos al sol” comenta Diego al “belicoso” pelotón. Hacemos la parada en una “posada”
algo singular y detrás, “otra senda para investigar”; repostamos, compartimos
viandas y a la “andorga engañamos”…de
paso, Ilde se anima y nos da una clase práctica de mecánica avanzada “cómo abrir
una válvula cuando no debo”….Risas y bromas, “te vemos saliendo de aquí
con la burricleta acuestas”.
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"Camino de Gamonal a Mejorada" |
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"Roberto, liderando en su territorio" |
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"Escondido entre las piedras" |
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"Camino del Hituero": Segurilla |
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"Echando un vistazo hacia Gredos" |
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"Entrada en la zona del Riscal" |
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"Domingo, animado y convencido" |
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"Típica senda del Riscal" |
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"Momentos de diversión..." |
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"¿No habrá caminos más anchos?"NO |
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"En un cuento de hadas..." |
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"Zona de umbría, rociada y escarcha" |
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"Entrada a la senda de la Majada" |
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"Otro apretón para el pelotón..." |
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"Por sendas estrechas" |
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"Deleite por la senda ganadera" |
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"....y antiguos vallados de piedra" |
Preparamos la vuelta, todavía
“flirteamos” con las “ceñidas sendas” para enlazar con la “parroquia marrupeja” ; caverna hechizada, oculta entre cortinas encantadas, meciéndose en las engalanadas ramas, donde la arboleda canta, las piedras avanzan,
la quietud danza sobre nuestras cabezas, los rotundos trinos del silencio rezuman a nuestro paso y
los ojos claros de su introvertida belleza, hipnotizan y embriagan a la audaz “grupeta”. Martín “El
Fiero” y Francis “El Paciente”, “ni sienten ni padecen” y escalan con brío, muy
eficientes…..Salimos del reconfortante letargo, Domingo “El Maca” suspira después de “este
fuerte trago”, “marrupejos parriba,
marrupejos pabajo, vaya la que me habéis clavao”, nos comenta aliviado. Ahora, en
modo distendido, “vagamos” por los
anchos caminos; en la aldea cagarrache nos despedimos de Diego e Ilde los
“bicigrinos”; hacia Talavera marchan por otros caminos perdidos y “más contentos que unas pascuas”. Por sus
callejas y plazas, atrás también dejamos Mejorada, sin novedad en este afable
tramo, hasta que en “La Gamonosa” con una “capea” nos topamos; con éxito el
temporal campeamos, por las inmediaciones del pueblo, unidades vamos dejando…y
cada cual, a su destino.
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"Es hora de continuar" |
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"Francis por la marcada senda" |
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"Miguel, también es portada" |
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"Vereda del Marrupejo" |
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"Salida de los andurriales" |
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"Camino del Hituero" |
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"Camino de Mejorada a Velada" |
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"La hora de la capea" |
En conclusión, ruta circular de 47 kilómetros, los principales caminos que
hemos transitado han sido: Camino público de
Velada a Gamonal, Mejorada, Segurilla, Camino del Hituero, Senda del
Riscal, Cañada Real Leonesa Oriental, Senda de la Majada, Senda del Marrupejo,
Camino del Hituero, Camino de Segurilla, Mejorada, Velada. Hemos cruzado las
localidades de Gamonal, Mejorada y Segurilla (ida y vuelta).
Pd: Roberto, muchas gracias por tú aportación fotográfica y el vídeo.
Buen día…………….SALUD
“mil caminos
por andar y mucho tiempo perdido sin saber a dónde ir, no tengo tiempo ni sitio….”
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