Domingo
(27-04-2025), con las burriclestas prestas y bien dispuestas, seis caballeros
veleños hacemos acto de presencia en el habitual punto de encuentro. Agradables temperaturas y previsiones nos presentan para esta jornada. “¡¡¡A Sotillo!!!”
es la propuesta de Roberto “El Bueno”, aunque , “habrá que estirar el corral
sobre la marcha” -comentamos.
Comenzamos
la jornada, nos damos novedades y “presentamos ofrendas” a la incorporación tardía de nuestro amigo,
Gabriel “Machaque”. Volvemos a “los caminos tradicionales”, después “del
temporal” y de atiborrarnos de etapas
por carriles más monótonos y cómodos;
escalamos “la empinada Gamonosa para abrir boca” y escurrirnos por los
entretenidos parajes cerreros floridos, acamados en tramos más serenos y tranquilos.
Sin
apenas hacer ruido “pero mucha tela que cortar”, atravesamos la villas vecinas
y en Segurilla, “Los Gabrieles”, por motivos varios, se quedan andorreando por
estos lares. Los demás, nos adentramos en “los jardines del Marrupejo”,
continuos subes y bajas entre callejas de encinas, el tupido piornal y una
mascletá de aromáticas floridas,
engalanando el privilegiado rincón.
“Nos encanta esta vía verde”, - con ironía comentamos, atravesando y
rodeados de verdosas praderas y postales cargadas de encanto.
Desde
la localidad de Sotillo, -sin pasar por la plaza-, “nos remangamos” para
afrontar la tendida y archiconocida subida, descansando a la sombra –ya nos
parece llana- y nos brinda sus mejores desniveles, que
salvamos con solvencia. Acordamos “desviarnos” hacia Marrupe -sin parada en el
pilón-, para descender por los enebros en esta ocasión. Previo aviso y
precaución por el mágico solar, ya que “de sobra sabemos del solicitado
recoveco”. No nos equivocamos y también hay romería en plena ascensión; por
todas partes, más burriclistas, “andarines y carreristas” al aire libre y
dejándose ver por las concurridas pistas. Sin novedad, después de la
“disimulada tachuela”, arribamos en Serranillos; unos minutos de asueto, con
café incluido, dulces y fruta para reponer fuerzas, mientras comentamos varias
jugadas en “la cantina.”
Después
del merecido descanso, retomamos el camino de vuelta, “más llevadero y plano”, hasta que “los rodadores con el
cuchillo entre los dientes” suben el ritmo; Martín “El Fiero” y “El Lobo” durante unos minutos, con fuerza se exhiben al lado “de una flaca”.
Sobre la marcha, decidimos alargar la etapa; otro compañero -tiene evento- y
elige la alternativa más rápida. Los demás, nos colamos por las solicitadas
parcelas, para llegar a Talavera y desde aquí, en modo más distendido, “sin
prisa pero sin pausa” por “el carril recreativo” vamos sumando tiempo y kms,
mientras continuamos conversando de asuntos varios, acompaño a “los caballeros
gamones” a sus casas y nos despedimos hasta la próxima etapa.
Destacar
de la etapa, la buena mañana que nos ha acompañado, las espectaculares estampas
cerreras, cargadas de colorido y de tonalidades verdes, inundando los variados
paisajes. “El paisaje le pertenece a la persona que lo observa.” “Elige un solo
maestro, la naturaleza.”
En
definitiva, ruta circular de 78 kms. Los principales caminos transitados han
sido, Cañada Real Leonesa Oriental, Camino de Velada-Mejorada-Segurilla-Camino
del Hituero, Antiguo Camino de Sotillo-Cervera-Marrupe-San
Román-Serranillos-Canal Bajo del Alberche-Camino de la Portiña-Talavera-Camino
de los Pinos-Mesa Alta-Antiguo Camino de Oropesa-Torrehierro-Gamonal-Velada.
SALUD………………….y
TIEMPO.
“…mil
caminos por andar y mucho tiempo perdido sin saber a dónde ir, no tengo tiempo
ni sitio…”
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